︎
La obra, que deviene de una investigación iniciada en el Museo Etnográfico Juan de Garay en Santa Fé, Argentina, surge casi desapercibida dentro de la práctica de Tirco Matute. Las fotografías que se presentan en el escenario fueron usadas como materia de organización y catalogación previa a la pesquisa. Como un vestigio imperceptible del proceso, el artista decide volver a mirarlas y transforma lo que antes era archivo en protagonista de la obra. Las manos tocas la pared de un museo vacío, que se encuentra cerrado para su restauración. La memoria del lugar está impresa en la ausencia de los objetos en las vitrinas y en las marcas de la pared de los cuadros antes colgados. Hay en el espacio algo de fantasmagórico. Pero ¿Serían las manos que rozan silenciosas la pared o el propio museo en reconstrucción?. Entre el espectáculo y la ruina, las manos bailan en un ritmo inconstante e inauguran un nuevo espacio.